El director británico Edgar Wright es el responsable de películas como "Shawn of the Dead", "Hot Fuzz", "The World's End" y "Scott Pilgrim", por lo que "Baby Driver" su nueva película prometía ser igualmente genial, y lo es.
El amor, la musica, la juventud no son temas ajenos a Wight, ya sea inspirado por un cómic o por dos de los más grandes cómicos británicos de los últimos tiempos (Simon Pegg y Nick Frost), las películas de Wright son una con la música, no la usan como un elemento más para darle emoción, se entretejen con la trama y los personajes siento una parte intrínseca de la historia y en Baby Driver la música es el personaje principal de la historia.
Baby es un chofer en Atlanta que trabaja para un grupo de asaltantes por un error que cometió cuando era más joven, manejar es su vida, es en lo que es el mejor y por es no le será tan fácil salir de ese mundo y comenzar una nueva vida sólo manejando en la carretera con la chica de sus sueños.
Con un espectro musical que va desde el blues de Bellbottoms, pasando por Ennio Morricone hasta Sky Ferreira, Baby Driver nos pasea por un mundo lleno de celebridades en donde la estética está presente todo el tiempo y nos sigue recordando que historias de amor tan improbables como las del cine no podremos ver jamás en la realidad.
El amor, la musica, la juventud no son temas ajenos a Wight, ya sea inspirado por un cómic o por dos de los más grandes cómicos británicos de los últimos tiempos (Simon Pegg y Nick Frost), las películas de Wright son una con la música, no la usan como un elemento más para darle emoción, se entretejen con la trama y los personajes siento una parte intrínseca de la historia y en Baby Driver la música es el personaje principal de la historia.
Baby es un chofer en Atlanta que trabaja para un grupo de asaltantes por un error que cometió cuando era más joven, manejar es su vida, es en lo que es el mejor y por es no le será tan fácil salir de ese mundo y comenzar una nueva vida sólo manejando en la carretera con la chica de sus sueños.
Con un espectro musical que va desde el blues de Bellbottoms, pasando por Ennio Morricone hasta Sky Ferreira, Baby Driver nos pasea por un mundo lleno de celebridades en donde la estética está presente todo el tiempo y nos sigue recordando que historias de amor tan improbables como las del cine no podremos ver jamás en la realidad.
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