La nueva serie de Netflix basada en el cómic del mismo nombre publicado por Archie Horror narra las aventuras de Sabrina Spellman antes de su décimo sexto cumpleaños, en un universo que nada tiene de parecido a lo que estábamos acostumbrados con la serie de televisión de los 90.
Con dos temporadas ya confirmadas, la primera estrenó el pasado viernes 26 de de octubre con diez episodios.
Protagonizada por Kieran Shipka como Sabrina, a quien vimos como la hija de Don Draper, Sally en Mad Men, Miranda Otto como Zelda Spellman, quien fue Éowyn en la saga de el Señor de los Anillos y Lucy Davis como Hilda Spellman a quien vimos en Shaun of the Dead y Wonder Woman, además de Ross Lynch como Harvey Kinkle a quien vimos en la serie de Disney Channel Austin & Ally.
Con escenarios nocturnos y un destacado color rojo el ambiente de la serie es lúgubre, aún de día se siente una pesadez en el ambiente que no deja salir por completo el sol, y es asi como se visualiza la dualidad de Sabrina, quien no esta convencida de convertirse en bruja por completo ya que ama a sus amigos y vida mortal demasiado, hija de un matrimonio prohibido en la comunidad de brujos en donde uno de ellos se enamoró de una mortal, la indecisión de Sabrina traerá muchos problemas.
Es una serie que no deja de lado la esencia adolescente de descubrir quien eres, amar intensamente y por supuesto pensar que eres el centro del universo, la historia no es nada original pero los personajes la complementan y soportan muy bien, en especial Ambrose, Chance Perdomo.
Dejando de lado el hecho de que Salem no habla y no es para nada una comedia como muchos esperaban cuando recién fue anunciada, esta nueva versión de Sabrina cuenta de una manera más actual el coming of age adornando el camino con un poco de magia, brujas y misticismo, logrando una historia entretenida que mantiene el suspenso durante todos los capítulos.
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